Algún vez te dije que a las mujeres se las conquista por el oído y con los pequeños detalles. Palabras, conversación, encanto, sensibilidad. No hay nada que seduzca mas a una mujer que un caballero a la antigua: gentil, amable, varonil, alegre, refinado, comunicativo, sencillo, interesante, romántico, prudente, temerario, previsible, detallista (recordar cada palabra que ella te dice es vital) misterioso, seguro y que siempre huela bien. Que la haga reír, pero que también la haga sentir segura.
Recuerda que quien trata a una mujer como una princesa, demuestra que fue criado por una reina. Tienes que hacer tu trabajo de hombre y saber interpretar las señales que ella te está dejando notar. Si te dice «Cuídate», es porque vales muchísimo para ella. Si te mira fijamente es que está intentando recordar bien tu cara para sus sueños. Se que a veces es un poco extraño saber que una persona a la que ves tan poco, te puede conocer mucho mas que los que están todo el día a tu lado, pero no deja de ser una muy buena señal, si ella se da cuenta de como estás anímicamente sin siquiera hablarte, es porque tiene una conexión única contigo en su corazón. Es como si te dijera: “¿Te quedó claro que te amo? ¿O te tengo que tirar mil indirectas mas?” A lo mejor llevas días sin hablarle o escribirle, pero nada cambia que eres tu a quien ella necesita y ama.
No hay un solo día en que ella no se pregunte: “¿No es raro como una persona que hasta hace poco era un extraño para mi, ahora se haya convertido en mi mundo?”; tal vez ella no esté muy segura qué fue lo que vio en ti, pero está convencida que no lo vio en nadie mas.
Posiblemente en ocasiones ella intente ignorarte, pero no lo hace porque no siente nada por ti, sino porque le molesta no estar al control de la situación (como le suele gustar a cualquier mujer inteligente) ella aún no aprendió que la persona perfecta no es aquella que llega a su vida y deja todo en paz. Al contrario, es quien llega para hacerle cuestionar cosas, cambiar su mundo, marcar un antes y un después en su historia, y revolucionar su vida como hasta ahora la conocía. Ella apenas se está dando cuenta de todo lo que le estás causando en su vida, especialmente cada vez que se viste y se mira al espejo, preguntándose como la verás tu. Te aseguro que cuando una mujer se viste, se maquilla y se arregla pensando en alguien…es porque está enamorada, aunque no quiera aceptarlo. Y aunque no lo creas, cada vez que la besas en la mejilla, ella se muere de ganas porque la besaras en la boca. Así que, mi viejo amigo, ¿de quién es la culpa? ¿Tuya por amarla o de ella por enamorarte? No lo se…pero estoy seguro que no debe haber un solo día en que no te preguntas: “¿Porqué ella no llegó antes a mi vida?” Y puedo darte mi palabra de honor que ella también está asustada de perderte, aunque sabe que todavía nunca te ha tenido.
Yo se que ella te ama y cuando escucha tu nombre, sus ojos brillan, sus pupilas se dilatan y su corazón se acelera. Te voy a decir algo, tómalo como un secreto, pero creo que es muy importante que tu lo sepas: Te extraña y casi no lo puede disimular. Créeme que se lo que te digo.
Cuando escucha tu nombre te añora, cuando teme encontrarte se inquieta, guarda tu foto y la ve cuando quiere, recuerda tu teléfono y le duele no poder llamarte o escribirte cada vez que tiene ganas. Créeme, le ha sido muy difícil vivir sin ti, todo el tiempo. A veces, en medio de una frase corrida, cierra sus ojos y no puede continuar. En esos momentos tu has llegado a su mente, y a ella le duele recordarte, sin poder tenerte cerca, aunque sea para charlar un poco. A veces llora y dice que se siente mal, pero yo conozco mejor que nadie esas lágrimas y se que tú eres quien las provoca. Otras veces cuando duerme, pide a Dios que te cuide, aunque en realidad preferiría hacerlo ella misma. Te es fiel porque tú no sales de su mente. No, nunca me lo ha dicho, nunca hemos hablado de ti, y no hace falta, la comprendo porque el silencio irrumpe su alegría y porque la presencia de cualquier otro hombre le es indiferente, ella daría todo por abrazarte y no soltarte nunca. ¿Te sorprende saber todo esto? Es que como todo hombre…nunca te das cuenta de nada, no reconocerías a un perro aunque te ladrara toda la noche, y no lo digo porque soy tu amigo, sino porque también soy hombre.
Si no le dices pronto lo que sientes, tarde o temprano alguien mas la enamorará; recuerda que las mujeres se enamoran del que las hace reír, pero por lo general se terminan casando con el que las hace sufrir. Y la culpa la tienen los hombres como tu, que no saben interpretar las señales de alguien que pide a gritos silenciosos que la amen bien.
Así que, mi querido amigo, acepta este consejo de uno de los últimos románticos que quedan de aquella vieja época en donde trabajábamos duro para enamorar a una mujer: No hables demasiado. Una mujer puede que olvide tus palabras, pero jamás olvidará como la hiciste sentir. Mírala directo al alma. Escúchala como si nada mas importara en el universo. Recuerda cada detalle de lo que te diga. Ella no siempre querrá que le resuelvas sus problemas, solo necesita un caballero que la escuche el tiempo que sea necesario.
Ella ni siquiera te ha besado y te aseguro que muchas veces se imaginó toda una vida contigo. Aduéñate de su corazón y sigue entrando en su alma sin pedir permiso y uno de estos días, sin pensarlo demasiado, dale un buen beso. En el caso que ella te mire sorprendida, no se te ocurra pedirle perdón, ten en cuenta que tu seguridad es una de las cualidades que a ella la subyugan; solo mírala a los ojos y dile: “Lo mío fue un acto de justicia, te robé un beso porque tu hace meses que me robaste el sueño”. Posiblemente sea lo último que le digas, antes que sea ella…quien te siga besando.
PD: Si te estás riendo porque soy cursi y antiguo, no me ofendo; después de todo somos amigos. Pero te recuerdo que de donde yo vengo, estas cosas siempre resultaban. Y que yo sepa, a todas las mujeres del mundo y de todas las épocas, las enamora exactamente lo mismo: Un hombre que sepa amarlas de verdad.
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